The Loverbirds en Netflix es película para distraerse este fin de semana

*THE LOVEBIRDS («Netflix»)

 

Reparto: Kumail Nanjiani, Issa Rae, Anna Camp, Joe Chrest, Kelly Murtagh, Moses Jacob Storm, Kenneth Kynt Bryan, T.C. Matherne, Mike Young, John C. Coffman, Andrene Ward-Hammond, Betsy Borrego, Lisha Wheeler, Gralen Bryant Banks, Vermyttya Erahn, Anthony Michael Frederick, Lucy Golden, Nicholas X. Parsons, Troy Faruk, Mahdi Cocci, Heathyre Perara, Briana Liu, Ken Knight, Paul Sparks, Kyle Bornheimer, Blaine Kern III, Jaren Mitchell, Catherine Cohen, Rob Eubanks.

Director: Michael Showalter («Un Amor Inseparable»).

Clasificación: «B-15». 

 

Por: Germán Ramírez. 

 

A punto de separarse, una pareja se enreda involuntariamente en un extraño, divertido y misterioso asesinato; a medida que se acercan al momento de limpiar sus nombres y resolver el caso, necesitan descubrir cómo ellos y su relación pueden sobrevivir a esa noche.

El gran problema de esta comedia se divide en dos partes: lo bueno y lo malo.

Lo Bueno:

Un elenco es bueno, sus dos protagonistas están soberbios en sus papeles, que nos harán reír a carcajadas en varios ocasiones en toda la película, así como la química que éstos dos tiene en la gran pantalla; es principalmente el actor Nanjiani (Eternats), quien sobresale un poco más de los dos, con un personaje irreverente y divertido.

Además, la discusión de los dos en sus escenas, al puro estilo del Stand Up, hace innovador al filme por cómo maneja a sus protagonistas, ya que se nota que en muchas ocasiones los dos actores improvisaron sus diálogos para darle más intensidad, ritmo y diversión al espectador; se le suma una idea muy interesante en la trama y algunos sucesos inteligentes en ésta, que al final no se explotaron muy bien del todo.

Lo Malo:

Iniciamos con su guión, ya que éste se vuelve tan inverosímil, que lo que estás viendo en pantalla jamás logra lucir coherente o creíble, sobre todo en cómo se van involucrando sus protagonistas a ello; se le suma que ninguno de los protagonistas o por lo menos alguien del elenco principal, tiene los pies en la tierra, por lo que menos logra su objetivo de lucir, en algún punto, creíble.

Por lo general en este tipo de filmes, alguno de sus personajes tiene los pies muy bien puestos en nuestra realidad, gran caso de ello es la cinta «Noche de Juegos», donde los personajes interpretados por Jason Bateman y Rachel McAdams, los tienen, principalmente el primero; esto hace que no se pierda en un mundo demasiado absurdo y tonto, algo que le pasa a este largometraje,

También, poco a poco la cinta va perdiendo ritmo, uno que solo recupera al final, cuando ya es demasiado tarde para salvarse.

A pesar de encontrarnos con un filme no original de Netflix y más bien, comprado por éste a Paramount, debido a la contingencia mundial, ya que el filme tenia planes de estrenarse en cines; no encuentras alguna diferencia en cómo se crean las comedias de la plataforma, por lo cual parece un filme 100% de la N roja y no, de una producción para el cine.

Esto es triste, principalmente debido a que a su director Showalter y sus protagonistas los respaldan nominaciones al Oscar, Golden Globe, Sindicato de Guionistas, Critics Choice Awards, Bafta, entre otros a Mejor Guión Original por la estupenda comedia «Un Amor Inseparable»; por lo cual la expectativa para este filme era muy alta, que a la vez es malo, ya que tal vez sin esta expectativa, el filme es mejor de lo que se deja ver.

Al final estamos ante una comedia más del montón, que logra destacar solamente gracias a sus dos soberbios protagonistas, que muy probablemente logremos ver a uno de ellos colado en las nominaciones de los Golden Globes u otros premios el siguiente año, gracias a sus estupendas actuaciones, ya que esto es innegable.

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