Buscan reunión, aunque sea por unos segundos, con la presidenta Sheinbaum en Pedro Escobedo
- Por: Manuel Chávez
El municipio de Pedro Escobedo recibió a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum. Cientos de personas se reunieron, aunque sea, para verla pasar en su camioneta oscura y con su convoy de acompañantes.
La cita era a las 4 de la tarde y la sede Quitanares, una zona al costado de la carretera 57, apenas unos kilómetros adentro. Los fanáticos de la presidenta llegaron desde temprano; a las 2:30 de la tarde, el lugar estaba repleto. Cientos de personas buscaban un lugar en el evento, para conocer una noticia que se prevé cambie la vida de millones de personas: el inicio de la construcción del tren México-Querétaro.
Como es costumbre en los grandes eventos, la gente se juntó en los filtros de acceso, cientos de personas con una única intención, ver a la presidenta. Aunque no hubo la efervescencia de otras citas, no llegaron las banderas, los peluches, las playeras, ni los recuerdos que ya son característicos de la cuarta transformación.
El espacio era tan pequeño al costado de la carretera y el evento tan reservado que solo se vendieron aguas, frutas, bancos y sombreros; el calor y el cansancio fueron una tendencia.
La mayoría de gente solo estuvo ahí por un encuentro de unos segundos, la presidenta llegó y solo únicos pudieron platicar con ella mientras ingresaba al evento, gritos de «Presidenta» y favores para saludar a López Obrador fueron la tónica, aunque algunos se salieron del guion y preguntaron incluso quién le alacia el cabello.
Después se reanudó la espera, la gente se quedó afuera a ver desde lejos la presentación del tan ansiado proyecto. Aunque todos fueron dispersados, la zona de sembradíos y el paso de las vías del tren, también es casa de una colmena de abejas que no estaba al tanto de la visita presidencial y atacó a algunos espectadores, pero para fortuna nada grave.
Aproximadamente una hora después, el evento terminó y llegó el segundo momento para el público. La gente corrió a la camioneta y pudo tomarse fotos, saludos y vídeos con la mandataria que con una sonrisa los recibió. Mientras, elementos de seguridad les pedían retirarse para que siguiera su camino de vuelta, luego de un fin de semana completo.
