Dos casos en una semana reavivan alarma por maltrato animal en Querétaro
- Manuel Chávez
Durante la misma semana se hicieron conocidos dos casos de maltrato animal en el estado de Querétaro: el burrito de Cadereyta que fue lastimado con fuegos artificiales por un par de jóvenes y el perrito de Querétaro que fue atacado con un arma de fuego por el dueño de una tienda; afortunadamente ambos siguen con vida. Esta situación pone en la mira la violencia contra los animales en el estado.
En entrevista, Gabriel Ochoa, director adjunto de comunicación de Peta Latino, organización que lucha por los derechos animales, explicó que son lamentables los casos que se han hecho conocidos en los últimos días en Querétaro, pero también comentó que es inimaginable la cantidad de situaciones que no logran hacerse virales.
«Lamentablemente, el abuso y el maltrato animal suceden en todas partes, es muy alarmante lo que sucedió en estos casos Cadereyta y con el perrito en esta la colonia Loma Bonita, son casos que se viralizaron y eso es muy importante, que se hable de casos de maltrato animal, pero imagínate todos los que no se han reportado y viralizan».

Respecto al caso en Cadereyta, aplaudió el actuar de la presidenta municipal de Cadereyta de Montes, Astrid Ortega, quien se pronunció en redes sociales al respecto y pidió a su equipo jurídico presentar una denuncia a quien resulte responsable.
Añadió que es importante señalar que una persona que lastima a un animal es probable que también tenga actitudes agresivas contra alguna persona.
«Una persona que lastima un animal es muy probable que pueda lastimar a un ser humano. Como esta persona que le disparó a un perrito. Es evidente que una persona normal no haría eso, tener un arma, salir a la calle y dispararle a un animal. Seguramente podría hacerlo o a lo mejor ya lo ha hecho con una persona».
Es por ello que destacó que es importante que la población no se quede callada ante cualquier situación que vea de violencia contra animales y se busque denunciar los casos y hacer justicia.


